lunes, 4 de diciembre de 2017

Es irónico.



No sé si quiero ver amanecer.
Le he pedido tantos deseos a las estrellas
que me asusta pedírtelo a ti
y que no se cumpla.
Te he visto tantas veces bailar sola
que ahora tengo miedo de ir a tu compás,
por si,
ya sabes,
te pisara.


Es irónico que fueras tú
la que me preguntase por las líneas
que un día escribiste,
aunque no fuese con tu letra.


No sé si me entiendes,
yo nunca he escrito nada
que no tuviera relación conmigo.
Y es que si hay algo que sé con certeza
es que las palabras pertenecen
a quien las evoca,
nunca a quien las plasma.


No te equivoques,
nunca has sido la historia de mi vida,
quizá algún capítulo,
nada de eso;
siempre has sido la página marcada
que nunca me atreví a quemar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario